Implantes Dentales: El estándar de oro para restituir dientes perdidos
Los implantes dentales son dispositivos comúnmente fabricados en titanio que se colocan por medio de cirugía en el hueso alveolar para restituir la raíz de los dientes perdidos o ausentes.
Sus orígenes tienen precedentes desde la edad antigua, con descubrimiento en restos egipcios y Mayas de fragmentos de conchas y algunas gemas en los alveolos de huesos maxilares y mandibulares. Esto podría indicar como se buscaba introducir materiales artificiales en el cuerpo humano, tal vez con fines de belleza o restitución de piezas dentales.
No fue hasta los años 60 que de manera accidental se descubrió la Osteointegración, gracias al padre de la implantología moderna, el Dr. Brånemark; este fenómeno se podría definir como la integración o perfecta adherencia, que se logra entre el implante de titanio colocado en el hueso, creando una formación solida, inmóvil, tan maravillosa que posibilita la colocación de alguna prótesis sobre su estructura, y de esta manera restituir el diente perdido.
La maravilla de los implantes desde la época de los 60 es tal, que anterior a esta fecha se usaban infinidades de métodos y materiales para restituir dientes, esto esboza la importancia que implica tener toda la dentadura para comer, el hablar, estética, es que no se trata de restituir un dientes por una sonrisa bonita, es la implicación que trae en el poder alimentarse, nutrirse, masticar, poder pronunciar las palabras adecuadamente, hablar.
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